Crónica forzada de la comida mensual de Junio 3 de 2014

A las 2 pm. pasó cortésmente mi querido Munir para darme un aventón –fue tal el aventón que hasta lo sordo se me quitó– a la comida, por estar mi auto en servicio, pasó a temprana hora ya que Flopis le había solicitado llegar media hora antes con objeto de hacerle una consulta jurídica privada a Munir (desde luego gratis).

Flopis llamó a las 14:35 horas para decir que no asistiría a causa de un pequeño catarro, rogamos que no fuera Ingles, y que se debía de cuidar por su inminente partida a Sudáfrica.

Llegamos a la comida en el camello negro de Chalela y sorprendentemente ya estaba sentado ante el mantel Popis, acabando con las entradas de salsa, queso y aguacates, vimos dos tristes platos vacíos como cadáveres después de la batalla. A los pocos minutos arribó Fernando Hidalgo. En total asistimos cuatro Willis a romper el pan el primer martes de junio del 2014.

Algunos telefonazos, Aba que se encuentra delicado de salud, Rudy que anda sufriendo la “novinosfobia”, Mosco que anda con su enfermedad de los tres ojos –en dos no ve y el tercero esta bloqueado–, Mangel que andaba de capa cáida y alguien más, que poca.

La comida estuvo sorprendentemente buena para los estándares pasados, los aperitivos abundantes y la charla, como siempre amena y productiva en recuerdos, conocimientos, historia y risas.

Alguien preguntó ¿qué harían si descubrieran que sus hijos eran “homo sapiens”? Tres de los asistentes dijeron que los correrían de la casa.

Más tarde después de otras bebidas el Dr. hidalgo partió dando tras trabadillas y con tufo a agave a una conferencia en la UNAM, más tarde después de otros alipuses nos despedimos muy contentos en espera de poder compartir con más de los Willichochos, con la esperanza de que la salud esté con todos para poder compartir... y tan tan, servido Flopis.

Mark Anthony Sordo

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