Williamescos

Sitio de los Williamescos: Compañeros de Generación de los años 50 del Colegio Williams en la Ciudad de México. La base de este grupo de muchachos de la tercera juventud es quienes cursamos el 1ro de primaria en 1951 y salimos en 3ro de secundaria de 1959. Desde entonces nos hemos venido reuniendo regularmente sin faltar un solo año. Este sitio es para tratar los temas de la amistad, las raíces compartidas, y el afecto por la escuela que ayudó a forjarnos.

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jueves, 24 de junio de 2010

Los Castellanos y los Gutiérrez-Poucel

El 24 de junio del 2010, Carlos y su esposa Barbara se juntaron a comer con Luis y su esposa Marilú en el restaurante Valquiria. Caía una lluvia torrencial, así es que para evitar mojarse, se quedaron hasta la noche platicando, riendo y mojándose por adentro con un rico vino.


miércoles, 2 de junio de 2010

Comida del 1° de junio de 2010

La Destilería: Llegamos pocos pero substanciosos. Gracias a la presencia de Munir, todos en el restaurante nos escucharon, hasta los que pasaban por la acera de enfrente. Gracias a Pepe Churches y Mangel Barrientos, no hubo un minuto de silencio. Los primeros en llegar fueron los hermanos Robles Uribe (Goofie y Alberto), Pepe R Churches, Carlitos Castellanos, José Luis Vega. La segunda ola de asistentes incluyó a Popi, Chucho Pontones, Flopis, Mangel, Munir y Aba Castañeda, quien llegó gritando “Miren estoy llegando antes de las 4 de la tarde”. En esta ocasión fuimos once a compartir el pan y la sal, faltando solo dos para que Munir se negara a comer con nosotros, con eso de que nuestro afamado abogado y culto amigo es algo supersticioso.

Puntos Destacados: Pepe Churches agarró el micrófono desde que llegó y no lo soltó, a pesar de sentarse junto a Munir, el del micrófono integrado. El Flopis, cuando se le ocurrió empezar a hablar con Chalie Boy, Pepe lo increpó diciéndole: “Óyeme Flopis, hazme caso que te estoy hablando.” Cuando viene alegre, Churches, al igual que Mangel, habla hasta por los codos. Empieza a platicar de Cuernavaca, como si nadie la conociera, ponderando y adornando tanto que, quien no conociera la Ciudad de las Flores, se imaginaría que estaba hablando de Dubai. De acuerdo con Pepe, el nada exagerado, Cuernavaca tiene torres mas altas que las Petronas, un Metropolitano, su Metrobús y hasta están pensando en construir el tren bala. Mangel habló de su familia y de sus nietos quienes, en lugar de decirle abuelo, le dicen “Pachón”, los que no saben hablar, los que si, simplemente le dicen “Panzón”. La primera vez que se lo dijo a Aba, estaba bien, pero luego se lo repitió al Flopis, luego a Carlos, luego a Churches hasta que nos tenia mareados con tanta repetición.

Charlie Boy nos dio una cátedra financiera de lo que es tener dinero, no como hacerlo, sino como conservarlo. Habló de los camiones ADO y nos contó la historia de Fernando Puga y su experiencia en los auto-transportes. Cuando de repente, se voltea y le dice al Flopis: “Tu pinche viaje tiene muchas equivocaciones.” ¿Cuáles? – contestaba el Flopis. “A donde quieres ir, las ciudades están mal escritas, con faltas de ortografía.” Carajo, le contestó el Flopis, "apoco tu también te estas convirtiendo en sheriff del lenguaje?"

Munir como siempre, alegre, simpático, y dicharachero se aventó un poema del ínclito bardo Don Apolonio Tijera de la Borbolla quien entre comillas fue uno de los fundadores de la poesía romántica en el mundo y dice así (favor de leerla mientras escuchan el concierto para violín en re mayor No. 2 de Peter Ilych Tchaikovski):

En este mundo matraca
de cagar nadie se escapa;
caga el buey, caga la vaca
y hasta la muchacha mas linda,
deja su bolita de caca.


La profundidad del poema y la emoción con la que lo recitó, demuestra el fino gusto de Munir.

En esta ocasión, gracias a la asistencia del Flopis, hay memoria fotográfica. Cuando no asiste, pues no hay evidencia de la comida. El mes pasado faltó a la comida y nos privamos de las imágenes de la reunión. Fernando tomó algunas con su celular, pero hasta la fecha todavía no nos las envía para su divulgación: "Por eso es veterinario, para que sus animales no lo chingen con esas pendejadas de: Ya cúmpleme, me diste tu palabra, ya pagame,..."

Pepe Vega no sabe de donde salió eso del Flopis. Propuso cambiarle su sobrenombre, apodo o remoquete y llamarle como a Lev Yashín –¿Se acuerdan de aquel portero que traía Rusia cuando jugó el Mundial de México en 1970?. Hay que llamarle “La Araña”, no porque sea buen investigador amigo de Tobi, ni por su resorte para atajar los penaltis, sino simplemente porque Luis tiene las nalgas igual que los arácnidos, muy arriba, casi pegadas al cuello. Pepe, que le gusta observarlo cuando va al baño, dice que en lugar de limpiarse la dona como cualquier mortal, se la limpia por arriba del hombro.

Hay que mencionar que la atención que le dieron los meseros a Luis fue de primera. Lo único que faltaba es que le llevaran una bacinica para que no se molestara de ir al baño. Nada mas levantaba la vista, y ya tenía a dos meseros diciéndole: PATRÓN, Patrón, patrón, ¿Qué se le ofrece?, ¿Quiere otra botellita de vino?, ¿Quiere ver la carta? o ¿Desea otra servilleta?. Carajo, Luis con una atención de primera, apapachos al por mayor, mientras que Vega se quejaba (dejara de ser Vega para no quejarse) de que había pedido mantequilla y se la llevaron media hora más tarde, de que había pedido una coca cola y después de una hora de estar enchilado, se la llevaron. Después de una exhaustiva investigación que realizó Munir, llegó a la, conclusión de que Luisito anda románticamente involucrado con la guapa administradora del lugar. Así es que para la próxima, le pediremos a Luis que ordene nuestra comida para que nos llegue bien y a tiempo.

Sal, como se auto denomina Robles (sueña que es hijo del Padrino), dijo que los ingenieros son albureros. Vega expresó vehementemente su desacuerdo, diciendo: “Yo soy ingeniero y nunca aprendí los albures ni en la escuela, ni en la vida profesional. Aprendí albures cuando no quise estudiar y mi señor padre me castigó, metiéndome de obrero en su negocio en donde aprendí a usar el torno, la fresa, el cepillo, el taladro, la escoba y, por consiguiente, los albures. Pero los albures que yo aprendí eran finos, no como los de Munir y Sal que son vulgares, corrientes y de mal gusto.” No seas mamón”, le gritaron al unísono Munir y Goofie.

Alberto, hermano de Sal, estuvo serio y circunspecto. Hay que destacar que es de muy buen diente, haciéndole competencia a los tragones del grupo: Popi, Hidalgo y Munir. Munir, mientras no gritaba, le entraba con fruición a su comida, quien de postre, se refinó cuatro sopes. Alberto, por su lado, engulló un pollo entero al pibil, acompañado de sus papatzules, rematando con un tremendo postre que de verlo, se nos fue el hambre. ¡Felicidades Alberto, eres un hombre sano y de generoso apetito!

El Aba, callado y “chupasolo” llevó su botella de vino para que solo le cobraran el descorche, y ahorrarse algunos centavos. Portándose de manera generosa, le ofreció una copa a Mangel, quien tratándose de vino, la aceptó con gusto. Trajo tres álbumes con fotos de nuestras cenas de hace muchos ayeres. Qué bien nos hizo vernos jóvenes y guapos, cuando no teníamos dolencias, arrugas ni problemas. Al ver las fotos, algunos sentimos nostalgia por los que ya no están con nosotros, como Anthony Smith, Gonzalo Restelli, los dos Fernandos Best y Puga, y José Luis Barrera. Flopis le dijo que todas las fotos y otras mas ya estaban subidas a nuestro álbum de Picasa Los Williamescos, preguntándole si ya las había visto. A lo que Aba le contestó orgullosamente: “Nunca he visto ni el Blog, ni las fotos.” Chucho Pontones sin poderse aguantar, le dijo: ¡Por eso no se te quita lo pendejo!

Chucho Pontones quien es lo contario a Mangel o a Pepe e igual a Flopis, siempre mesurado para hablar, muy atinado en sus comentarios, habla sin gritos y sin micrófono, sin embargo cuando habla, ¡aguas! hay que estar a las vivas.

Popi fiel a su forma de ser, se la pasó jode y que jode, aunque hay que reconocer que estuvo mas calmado que de costumbre. “José Luis” le ordenaba al bioquímico, “toma notas para la crónica”, “ya apuntaste lo que acaba de decir”. Es mejor que Popi sea así “chingaquedito”, a que nos diga que somos unos ignorantes, o que hable de alto pedo temas que no entendemos, presumiendo de sus matemáticas, física y mecánica cuántica.


Uno de los temas generales que se trataron fue la muerte de Don Gabriel Vargas, autor de “La Familia Burrón”, fue uno de los voceros urbanos mas importantes que ha tenido México. El y Don Salvador Flores “Chava Flores”, uno con las caricaturas y el otro con su música, plasmaron el México verdadero de los 50s y 60s, ilustrando con sus personajes, los sufrimientos, alegrías, penurias, inquietudes, desafíos de la mayoría de la población. Quien no recuerda la vecindad y la pobreza de la familia Burrón Tacuche, o los millonarios de Doña Cristeta y Floro Tinoco (a este último su papá le daba un millón de pesos de domingo), o al poeta (y no lo digo por el buen Emilio) Avelino Pilongano Pericocha, o la ex vedette La Bella pareja de don Susano Cantarranas, o a los políticos que robaban a mas no poder como fueron Don Juanon Teporochas y su compadre, o “El güen Caperuzo” quienes explotaban verdaderamente a sus respectivos pueblos, o al Diputado Capaloros que siempre andaba armado y diciendo que, como buen político, tenía fuero y todo mundo le hacia los mandados. Una gran gama de personajes que durante muchos años nos hicieron reír. Descanse en Paz Gabriel Vargas: Otra noble alma deja nuestro mundo, país y cultura.

En la próxima comida resolvimos sentar juntos a Pepe Churches y a Mangel, a ver si no hacen corto circuito.

La frase del mes es: “¿Por qué no te callas?”



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